domingo, 27 de mayo de 2018

CARTAS CREATIVAS

Una actividad muy chula y muy especial, sacada de las RUTAS DE LECTURAS son las cartas creativas. Mi puesta en práctica es la siguiente.

Después de haber leído (en el amplio sentido, observado, comentado y analizado) algunas cartas literarias, género epistolar, especialmente en álbumes tan especiales como:



y de haber hecho algunas de las actividades que al respecto suelen traer todos los libros de textos. Planteamos ésta que se sugiere en las RUTAS DE LECTURA.

Llevo a clase unas cartas que esconden personajes de cuentos clásicos (parece que los conocen todos, pero no, nos sorprendería saber cuántos desconocen al Gato con Botas, entre otros, prácticamente todo lo que no está "disneyzado" no existe) y entrego dos boca abajo a cada alumno y alumna. No pueden mirarlos hasta que no están repartidas todas las cartas. Les pido que guarden silencio, que nadie diga quiénes le han tocado, a ver si luego lo pueden averiguar.

En fin, se trata de que un personaje le escriba a otro, contándole lo que ellos quieran, la imaginación al poder. Salen cartas de lo más divertidas, y es que el azar a veces es, cómo decirlo, fortuito, mágico, desternillante... Como en la vida, hay parejas que nadie nadie se imaginaría, sin embargo, tienen su historia.

Después de tres cursos realizando esta actividad, creo que cada vez me gusta más Estas son solo algunos ejemplos:















Sin duda, es más divertido que la clásica carta al uso, y potencia la imaginación.

Cuántas cartas hemos escrito algunas y algunos, esperando encontrar esos amigos a los que también les gustaba cartearse. Lástima que se haya perdido actividad tan personal e íntima para dejar paso a todos nuestros comentarios en las redes sociales. La intimidad y lo íntimo es ahora público y recibe muchos me gusta, al menos, eso nos gustaría a todos, valga tanta redundancia. ¿Deberíamos enseñar ahora a escribir en Facebook o en Instagram? ¿Quizá deberíamos explicar que no se puede ni se debe dar "me gusta" a todo, que hay que ser crítico, o esto los llevaría al fracaso en el mundo social? ¡Cómo hemos cambiado!

MUTIS POR EL FORO

Visto qué es la Literatura, sus recursos, sus géneros... dentro de los cuales ya estudiamos la narrativa, la poesía, ahora nadie podrá hacer "mutis por el foro" porque llega el TEATRO. Pic nic de Fernando Arrabal nos espera.

Nada mejor para comenzar este género que visitando nuestro coqueto y maravilloso Teatro Palacio Valdés, que debe su nombre al escritor asturiano Armando Palacio Valdés, quien tantas huellas ha dejado en nuestra Villa.


Con esta unidad diversión y aprendizaje irán de la mano.

jueves, 24 de mayo de 2018

"HAIKUS Y OTROS VERSOS": EXPOSICIÓN

El fruto de todo el trabajo que hemos realizado en la unidad de poesía en 1º de la ESO puede verse en una exposición que hemos llamado "Haikus y otros versos", que se encuentra en el vestíbulo del IES Carreño Miranda (Avda. Cervantes, 26; Avilés). Puede visitarse tanto en horario de mañana como de tarde.

En ella nos vamos a encontrar los libro-acordeón que realizaron con sus doce haikus ilustrados, uno por cada mes del año, inspirados en el álbum ilustrado Postales para un año de la editorial A buen paso. 

Asimismo en la pantalla, pueden verse fotos de estos libro-acordeón artesanos junto al recitado de cada uno de los haikus. 

Además, en la exposición se encuentran las invitaciones que los alumnos y alumnas llevaron a casa, en forma de corazón, realizadas por ellos, para que su familia valorase y disfrutase de un recital poético en su propio hogar.

Junto a ellos encontramos los poemas "Me gusta", que salieron tras la lectura del "Me gusta" de Pablo Neruda, "El desayuno de Luis Alberto de Cuenca y el "Me gusta" de Saray Alonso, poeta avilesina a quien tuvimos el gusto de disfrutar en las aulas como alumna y ahora como ponente.

De igual manera quedan expuestos los caligramas que el alumnado realizó con los versos que recibió jugando al "Poético amigo invisible".

Decorando la misma, aparecen haikus de autores como Mario Benedetti, Mar Benegas, Octavio Paz... ilustrados por nuestros alumnos y alumnas.

Un gran trabajo de una mayoría del alumnado de los grupos 1º ESO B y D.

















domingo, 13 de mayo de 2018

EXPLOSIÓN DE SENTIMIENTOS: LA POESÍA


           El día 21 de marzo se celebra el Día Internacional de la Poesía y ese es el día que elijo en 1º de la ESO para comenzar con este género literario, partiendo del hecho de que la poesía no es saber cuándo nació Zutano ni murió Mengano; que la poesía tampoco es tener un lazo para cazar metáforas y otras figuras literarias; del mismo modo que no es contar sílabas. La poesía es ritmo. La poesía es comunicación. O por decirlo mejor, la poesía es comunicar con ritmo. La lírica es el género en el que mejor se aprovecha la sonoridad de las palabras, de su música interior (creo); es en ese género donde a las palabras se las pone a bailar. Hay muchos bailes distintos que pueden hacer las palabras. En todos ellos está la poesía. Salgamos a buscarla.




            El Día Internacional de la Poesía llego a clase con una caja vistosa, colorida (yo utilizo una caja de folios y la forro con un bonito papel de regalo, reutilizable para otros cursos, por supuesto no es necesario hacerse una al año). Esa caja llega llena de canutillos de colores variados que no se sabe lo que esconden.

            Al entrar en clase (y después del ritual de comienzo de las mismas –del que ya os hablaré-) les anuncio lo que se celebra y que voy a hacerles un regalo. ¿Alguien duda de que ya están en el bote?

            No le doy a cualquiera cualquier poema, no. Pienso en ellos, en su individualidad, y elijo el poema que pueda transmitirle algo a cada uno de ellos. Es una clase mágica. Desenrollan aquel papel, lo leen y quieren compartirlo con los demás.

            No hay dos personas con el mismo poema, eso sería imperdonable. Así, como quien no quiere la cosa, leemos un montón de poemas, y nos reímos y pensamos por qué habrá seleccionado este para mí o aquel para mi compañera.

            Esto no sería posible sin las conserjes que me hacen las fotocopias en folios de colores sin rechistar –todo lo contrario, encantadas- aunque esto suponga un poco más de trabajo. Pero a pesar de que el blanco es un color, la uniformidad no lo hace excepcional.

            Así celebramos un bonito Día de la Poesía. Lo mejor: que ven que la poesía no es algo tan lejano a ellos, que les puede hablar... ¿Cómo lo sé? Pues no me hace falta hacer ningún examen para saber esto. Lo sé porque a más de uno se lo he oído decir alguna vez. “Elegí este poema porque a mí no me gustaba la poesía, Deli me regaló éste y me gustó”, así de simple y de profundamente lo expresan ellos, ya tienen un primer poema que les gusta. Después, ellos solos deberán completar su colección, la cuestión es solo empezar.         
       

          Este curso he tenido una experiencia singular. Cuando la clase había acabado y yo aún permanecía en el aula recogiendo mis bártulos, aparece por la puerta una alumna de otro 1º, repetidora (esto ya da mucha información), le digo “pasa, te regalo un poema”. Sonrió y me dio las gracias cuando yo, sinceramente, esperaba un bufonazo. Pensé que lo rechazaría, PERO no. Lo cogió y me sonrió. A veces, después de aquella mañana me la encuentro por el pasillo y me dice “tengo tu poema en el cajón de mi mesita”, la que sonrío soy yo, le digo, “léelo” y ¿sabéis lo que me dice? “Lo he leído unas cuantas veces”.

            Volviendo a lo que estaba, a mí el Día 21 de marzo siempre me pilla a mitad de otro tema (“El Cuentacuentos”) así que ahí se queda de momento nuestro acercamiento a la poesía.

 


            Cuando acabamos esa unidad, nos adentramos en la Poesía. ¿Qué hacemos para acercarlos? De todo.

            El primer día aparezco, como siempre, cargada de libros de poesía. Hablamos de ellos, los miramos, leemos un poco de aquí y de allá. Puesto que acabamos de hacer el cuentacuentos, leemos a León Felipe...

Sé todos los cuentos

Yo no sé muchas cosas, es verdad.
Digo tan sólo lo que he visto.
Y he visto:
que la cuna del hombre la mecen con cuentos,
que los gritos de angustia del hombre los ahogan con cuentos,
que el llanto del hombre lo taponan con cuentos,
que los huesos del hombre los entierran con cuentos,
y que el miedo del hombre...
ha inventado todos los cuentos.
Yo no sé muchas cosas, es verdad,
pero me han dormido con todos los cuentos...
y sé todos los cuentos.



... y algunos versos que hablan de poesía (y de no rendirse)



XXI

¿Qué es poesía?, dices mientras clavas
en mi pupila tu pupila azul.
¡Qué es poesía!,  ¿Y tú me lo preguntas?
Poesía... eres tú.

Gustavo Adolfo Bécquer

‡‡‡‡‡



...La poesía es como el viento

o como el fuego, o como el mar.

Hace vibrar árboles, ropas,

abrasa espigas, hojas secas,

acuna en su oleaje

los objetos que duermen en la playa

José Hierro

‡‡‡‡‡



La poesía es un sabroso vino

De la imaginación,

Que, moderado,

Alegra el espíritu,

Regala el entendimiento,

Deleita la fantasía

Y menoscaba la tristeza.

Bernardo de Balbuena (1568-1627)

‡‡‡‡‡



La poesía es un arma cargada de futuro

Cuando ya nada se espera personalmente exaltante,
mas se palpita y se sigue más acá de la conciencia,
fieramente existiendo, ciegamente afirmado,
como un pulso que golpea las tinieblas,

cuando se miran de frente
los vertiginosos ojos claros de la muerte,
se dicen las verdades:
las bárbaras, terribles, amorosas crueldades.

Se dicen los poemas
que ensanchan los pulmones de cuantos, asfixiados,
piden ser, piden ritmo,
piden ley para aquello que sienten excesivo.

Con la velocidad del instinto,
con el rayo del prodigio,
como mágica evidencia, lo real se nos convierte
en lo idéntico a sí mismo.

Poesía para el pobre, poesía necesaria
como el pan de cada día,
como el aire que exigimos trece veces por minuto,
para ser y en tanto somos dar un sí que glorifica.

Porque vivimos a golpes, porque apenas si nos dejan
decir que somos quien somos,
nuestros cantares no pueden ser sin pecado un adorno.
Estamos tocando el fondo.

Maldigo la poesía concebida como un lujo
cultural por los neutrales
que, lavándose las manos, se desentienden y evaden.
Maldigo la poesía de quien no toma partido hasta mancharse.

Hago mías las faltas. Siento en mí a cuantos sufren
y canto respirando.
Canto, y canto, y cantando más allá de mis penas
personales, me ensancho.

Quisiera daros vida, provocar nuevos actos,
y calculo por eso con técnica qué puedo.
Me siento un ingeniero del verso y un obrero
que trabaja con otros a España en sus aceros.

Tal es mi poesía: poesía-herramienta
a la vez que latido de lo unánime y ciego.
Tal es, arma cargada de futuro expansivo
con que te apunto al pecho.

No es una poesía gota a gota pensada.
No es un bello producto. No es un fruto perfecto.
Es algo como el aire que todos respiramos
y es el canto que espacia cuanto dentro llevamos.

Son palabras que todos repetimos sintiendo
como nuestras, y vuelan. Son más que lo mentado.
Son lo más necesario: lo que no tiene nombre.
Son gritos en el cielo, y en la tierra son actos.

Gabriel Celaya



NO TE DETENGAS

No dejes que termine el día sin haber crecido un poco,
sin haber sido feliz, sin haber aumentado tus sueños.
No te dejes vencer por el desaliento.
No permitas que nadie te quite el derecho a expresarte,
que es casi un deber.
No abandones las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario.
No dejes de creer que las palabras y las poesías
sí pueden cambiar el mundo.
Pase lo que pase nuestra esencia está intacta.
Somos seres llenos de pasión.
La vida es desierto y oasis.
Nos derriba, nos lastima,
nos enseña,
nos convierte en protagonistas
de nuestra propia historia.
Aunque el viento sople en contra,
la poderosa obra continúa:
Tu puedes aportar una estrofa.
No dejes nunca de soñar,
porque en sueños es libre el hombre.
No caigas en el peor de los errores:
el silencio.
La mayoría vive en un silencio espantoso.
No te resignes.
Huye.
"Emito mis alaridos por los techos de este mundo",
dice el poeta.
Valora la belleza de las cosas simples.
Se puede hacer bella poesía sobre pequeñas cosas,
pero no podemos remar en contra de nosotros mismos.
Eso transforma la vida en un infierno.
Disfruta del pánico que te provoca
tener la vida por delante.
Vívela intensamente,
sin mediocridad.
Piensa que en ti está el futuro
y encara la tarea con orgullo y sin miedo.
Aprende de quienes puedan enseñarte.
Las experiencias de quienes nos precedieron
de nuestros "poetas muertos",
te ayudan a caminar por la vida
La sociedad de hoy somos nosotros:
Los "poetas vivos".
No permitas que la vida te pase a ti sin que la vivas ...[1]

Walt Whitman (atribuido)

            Los días sucesivos voy mostrando libros, y recitales, a la par que proponiendo actividades. (No he dicho que tenemos libro de texto y lo usamos. Nos gusta, o me gusta a mí, ahí tienen la información recogida y ordenada, es su manual de consulta y estudio, el lugar al que irán si se pierden y no encuentran el camino. El lugar al que van cuando no pueden asistir a clase).

            En fin este era otro tema, estábamos con los libros recomendados. Por ejemplo, si quieren escribir poesía, deben leer su primer ensayo (qué palabra tan grande ésta); José Luis GARCÍA MARTÍN: Lecciones de poesía para niños y niñas inquietos, Ed. Visor.




            Este curso algunos alumnos me han recomendado a mí la antología de Vinces Vives que leyeron en sexto en algunos colegios. Genial. Tienen un libro de poesía variado en su Biblioteca personal, es ideal.

            También este curso tuvimos la suerte de contar con dos poetas que se acercaron a ellos y les abrieron un sinfín de posibilidades.

            Saray Alonso fue alumna del Carreño Miranda y ya va por su tercer poemario. Muy cercana. La ven real, algo que podría ocurrirles a ellos mismos.  Para preparar su visita cogimos “Me gusta cuando callas” de Pablo Neruda, “El Desayuno” de Luis Alberto de Cuenca y “Me gustas” de Saray para hacer nuestro propio “Me gusta” y para ver así la intertextualidad. Al igual que ocurre con las muñequitas rusas, unos textos nacen de otros, son fuente de inspiración.

            En 2018 Saray Alonso ha presentado su tercer poemario Rotos y descosidos. Lo hizo en Avilés y me invitó a mí, su tutora en segundo de Bachillerato a ser su maestra de ceremonias. Se me ocurrió proponérselo a algunas de mis exalumnas, hoy en 2º de la ESO, e incluso a las actuales y para mi sorpresa aceptaron, recogieron el guante que les lancé. Un sábado de vacaciones asistieron a una presentación de un libro de poesía, a la presentación de este libro de poesía del que estamos hablando para recitar poemas de su libro anterior Cuando tú ya no, si esto no es poesía que me expliquen lo que es.







            El otro poeta fue Raúl Vacas (gentileza de la Editorial Edelvives, con su Eso y Esto), ingeniero de la poesía, artesano de las palabras. Con sus sorprendentes creaciones les muestra que la poesía está en todas partes y que nos la podemos fumar o tomar como analgésico... Es muy necesario que conozcan poetas que hablen su lenguaje.



            Con esta unidad también jugamos al POÉTICO AMIGO INVISIBLE. Se trata de dejarse versos de distintos poemas, de distintos autores, con los que luego haremos un caligrama.






            Recitamos poesía, para eso visionamos algunos recitales de jóvenes poetas, y la recitamos siguiendo el patrón que mi admirado compañero Carlos Botamino ha preparado (presentación, recitado, análisis y conclusión). Como hiciéramos para el cuentacuentos, hacemos una invitación para sus casas, para que practiquen delante de sus familiares a recitar el poema que ellos han elegido para la ocasión.






            Leemos y escribimos haikus. Los maravillosos haikus de Mario Benedetti, los de Mar Benegas... Escuchamos a Enrique Páez en youtube explicando qué son y cómo se hacen. Finalmente, los hacemos.


            No hay dos cursos académicos iguales, porque las circunstancias nunca lo son. En éste cayó en mis manos Postales para un año de QUARENGHI, Giusi y Anna CASTAGNOLI (Ed. A buen paso, 2017). Precioso. Formato postales. En algunas, que no en todas, un haiku, como en invierno:

Tiempo de estrellas

que abandona el cielo

Fugaz caída.

            Entonces decidí pedirles doce haikus, uno por cada mes. Confieso que esto lo hice mucho antes de adentrarme en poesía, lo propuse en octubre, para que llegado abril tuvieran mucho adelantado. Los más cumplidos lo tenían; los más rezagados tuvieron que hacerlo “tarde, mal y nunca” que se dice. ¿Qué le vamos a hacer? La mayoría lo hacen.




            Con ellos hemos creado nuestro libro-acordeón que contiene un haiku para cada mes del año y una biografía que había de ser lo más poética posible. Expondremos los resultados. Adelanto que hay verdaderas joyas. Ahora los queremos grabar y hacer vídeo-poemas, pero el tiempo nos está pisando los talones y el telón está a punto de levantarse, porque, señores y señoras, aún nos queda el teatro y la función está a punto de comenzar.





            Pasen y vean (eso será para otra entrada).


Una prueba más de que la poesía llega.












[1] WHITMAN, Walt. http://www.personarte.com/whitman.htm







sábado, 12 de mayo de 2018

AL FINAL, LOS PADRES TIENEN RAZÓN


 
              La verdad es que cuando somos jóvenes, preadolescentes y adolescentes, nada de lo que les gusta a nuestros padres puede gustarnos a nosotros. Las amigas con hijos adolescentes me cuentan, ya llegarás a este momento, ya... pasas de ser una DIOSA  a ser menos que nada, a que te desprecien, a que te ignoren... El corazón se me encoge al pensar en ello y quiero creer que son unas exageradas, a pesar de que sé que no lo son, porque también he sido joven y también he protestado por muchas de las decisiones que tomaron mis padres en su momento, todas buenas para mí, sin duda.

                Ahora que soy una cuarentona, que la adolescencia  me ha quedado muy lejos, me acuerdo de una discusión que yo siempre mantenía con mi madre. Yo no soportaba mi nombre, “Adelia”, qué nombre, no me daba más que problemas, nadie lo entendía, me llamaban “Adela”, “Delia”, “Adelina”, “Adelaida”, “Dalia”, “Amelia”... y lo que es peor, me lo ponían en los títulos, en las listas. Si esto fuera poco, había quien para rematar añadía MARÍA, María Adelia. Yo quería que me llevaran los demonios, como decía una amiga de mi madre “que me lleven los demonios”.

                Esta discusión era muy recurrente con mi madre. Cada vez que alguien utilizaba otro nombre para referirse a mí, lo cual, ya digo, era muy a menudo. Os podéis imaginar. Cada cosa que iniciaba, cada persona que conocía, cada trámite que hacía... ¡una cruz!

                Yo entendía la postura de mi padre. Mi padre habia elegido el nombre de su abuela. Yo eso lo respetaba. Una abuela es una abuela, y las mías eran estupendas, así que comprendía que mi padre hubiese querido ponerme el nombre de su abuela. PERO que mi madre lo hubiese consentido, eso me parecía el colmo de los colmos. La subordinación de la mujer a los gustos de los hombres, poco espíritu luchador. Ahora me río solo de pensarlo, qué joven era.

                Mi madre, con este argumento, no podía, por ahí no pasaba. Ella siempre me argumentaba que a ella le gustaba mi nombre, que era distinto, único, que no se oía,  era casi casi, me decía, exclusivo, y que ya había suficientes “Josefinas Marías” por el mundo, que por ahí sí que no iba a pasar. ¿Dónde podía yo comparar llamarme Adelia con llamarme Josefina María?. Yo, sin embargo, erre que erre. La adolescencia ya se sabe; y mi cruz, que es una cruz, lo crea quien lo crea y pasen los años que me pasen.

                Es cierto que la historia que me contó mi profesor de Griego sobre el origen de mi nombre, me pareció muy interesante, y de lo malo, me situaba en Grecia, con los mitos, la isla donde nació Apolo. Aún así, cada vez que llegaba un nuevo encuentro, me defecaba en Grecia, en los Mitos y en ...

                Ana Cano, conocida y reconocida filóloga, me dijo una vez cuando yo le comenté mi animadversión a mi nombre, que a ella le parecía un nombre bien bonito por su sonoridad, presencia de tres vocales y consonantes sonoras y líquidas, el sonido fluía limpio. Por un momento, sentí que tenía razón, mi nombre sonaba muy limpio. Me duró lo que me duró.

                Resulta que hace poco unas amigas se acordaron de mí durante el Viaje de Estudios. Vieron una pastelería en Obidos, Portugal, que llevaba mi nombre. No Adela ni Delia ni nada de eso. “Adélia”, eso sí, con tilde.

                Entonces empecé a pensar: mi bisabuela, a quien debo el nombre era oriunda de Ciudad Rodrigo, Salamanca, y esta ciudad es fronteriza con Portugal. Los límites de las lenguas no tienen nada que ver con los límites lingüísticos, esa cercanía de tierras, ese espacio común compartido...  ¿no va a ser el mío un nombre portugués?

                Y como todos los caminos llevan a Roma, o en mi caso al álbum ilustrado, voy y me encuentro éste

ALPHEN, Jean-Claude: Adélia, Pulo do Gato, Sao Paulo, 2016


                Un álbum ilustrado publicado en Brasil, en portugués, por supuesto, y que se titula así Adélia. ¿Sabéis quién es esa “Adélia” de la que habla el libro? La cerdita rosa que acompaña a la niña. Ella es la protagonista de este állbum. Un álbum que habla sobre la devoción, admiración y pasión que siente una cerdita que ama y adora la lectura. Vamos, que el nombre me viene como anillo al dedo. Yo soy esa cerdita.

                Es un álbum precioso, de verdad, no porque lleve mi nombre con tilde –que es lo único que me hubiese faltado en la adolescencia, que mi nombre llevase tilde, porque seguro que sería otra pelea que tendría que lidiar, nadie se la pondría-; sino porque no es muy habitual por este lado del océano encontrarnos álbumes ilustrados que primero combinen texto e imágenes, luego solo imágenes, para volver al final del libro a la combinación de texto e imágenes. Es curioso, sorprendente  e interesante.

                El juego con el color, o con la ausencia del mismo, ver que solo Adélia tiene color en ese mundo sin libros y que solo la luz que la cerdita para leer tiene color es una metáfora tan extraordinaria como emocionante. La lectura es la luz, no mi nombre sin “A” como me explicaba aquel profesor de griego, o quizás es que hay varias luces. Seguro que esto también.

                A las madres con hijos adolescentes, paciencia, ya se sabe, “no hay mal que cien años dure”; y al final, todos aprendemos a valorar lo que las madres, y los padres, por supuesto, nos han dado.