dglobo: mayo 2019

¿Aún no tienes la tuya? El alumnado de segundo ESO D y tercero B, C y D ya ha empezado a repartirlas. Mostrarán sus álbumes ilustrados y el proceso de creación de los mismos.

sábado, 18 de mayo de 2019

PARÍS BIEN VALE UNA ENTRADA EN EL BLOG

París, París... Teníamos muchas ganas de vernos en París y ha sido una experiencia inolvidable.

Abrazar la Torre Eiffel

Vimos arder Notre Dame, sin saber qué ocurría.

No podíamos irnos sin ver "La Mona Lisa"

París, París... tenemos que volver.

OCURRENCIAS

Miércoles, 15 de mayo de 2019.

¿De qué libro escribe él? Pues del último que se compró, en la Feria del Llibru y del Discu n'asturiano.

NINFAS ROTAS, ¡CUÁNTAS HAY!

GÓMEZ CERDÁ, Alfredo: Ninfa rota, Anaya, Madrid, 2019.

El valor terapéutico de la escritura creo que es algo que no se puede negar. No sé si está científicamente demostrado, pero yo lo he comprobado por mí misma en más de una ocasión. Sentarse delante de una hoja en blanco (o cualquier otro color) y decidirte a poner en ella lo que te está ahogando, es un proceso liberador. A la hoja en blanco le dices, en la hoja en blanco escribes lo que no le dirías a nadie, probablemente no exagere, a nadie. Escribes lo que te sale de dentro sin pensar si parecerá mal, sin ser políticamente correcta, sin reproducir mecánicamente lo que te han enseñado que debes hacer o decir.

Ahora bien, ¿ser capaz de escribirlo, de leerlo después de tu puño y letra te hace cambiar? Eso no lo resuelve Gómez Cerdá en esta novela, más bien nos hace creer lo contrario, pero tampoco lo sé porque resulta que esta novela, si es que es una novela, no tiene final. El final lo tengo que poner yo, lo tienes que poner tú, lector, lectora. No hay final.

Entonces volvemos atrás: ¿es una novela si no tiene final? ¿Dónde quedó aquello del planteamiento-nudo y desenlace que siempre nos hacen/hacemos estudiar?

¿Es una novela si es un diario que un psicólogo hace escribir a una chica que vive enamorada, locamente enamorada, de un maltratador?

¿Es una novela si algunos capítulos son poemas?

¿Es una novela si en muchos párrafos hay diálogos teatrales, esto es, teatro con personajes tomados de la mitología griega y latina?

¿Es una novela si en muchas ocasiones se limita a copiarnos los diálogos que la protagonista y el opresor, un chico de su clase, se envían por WhatsApp?

Está claro que cada día los cajones están más revueltos y los géneros menos claros, las distancias se acortan hasta el hecho de convivir juntas en un mismo espacio, juntas en las páginas de un libro, por ejemplo de éste, Ninfa Rota.

Una de sus grandes maestrías es sin duda ésta. Una obra, una novela, en la que los adolescentes tienen muestra de tres diferentes géneros literarios. Hacerlo sin que resulte extraño, complicado, es lo que lo convierte en maestría.

La temática, por otro lado, tremendamente atemporal. Pero hoy en día la tratamos, la ponemos sobre la mesa, la discutimos, nos enfrentamos a ella. ¿Puede una adolescente con una buena formación -ha crecido entre mitología y cuentos-, con una familia no desestructurada, con amigos, con todo, lo que se dice todo, enamorarse ciegamente de un descerebrado?

Yo me echo a temblar pensando que sí y la novela no me lo desmiente, no tiene final, porque si lo quiero lo tengo que poner yo, y me he quedado pensando y pensando y pensando y no sé qué final ponerle. ¿Me ayudas tú?

Ayúdame a poner ese final que todos querríamos seguramente, pero no lo olvidemos, como se cuenta en la novela, "Lo importante en la vida es el mientras tanto", porque mientras buscamos/pensamos cuál sería ese final (ella se desenamora / él cambia -un magnífico final para el mundo Disney-), mientras tanto, digo, en el mundo muchas chicas siguen sufriendo violaciones, agresiones físicas, psíquicas, vejaciones, abusos... algunas, como la protagonista de esta historia, en nombre del amor.

Así que, mientras tanto, mientras se nos ocurre un final, hagamos algo en el presente. Se necesitan más Nereas, mi personaje favorito, sin duda.

Huyamos de quien dice: "No quiero que tengas esos amigos", hay muchas formas de decirlo.

jueves, 16 de mayo de 2019

ESCRIBIR COMO LECTORES DE NARRATIVAS ILUSTRADAS

Todo esto comienza (el comienzo real habría que buscarlo en el momento en el que yo me apasioné por los álbumes ilustrados y les encontré un hueco en el aula) con un curso del CPR de las Cuencas Mineras, https://cprcuencasmineras.es/cursos/show/escribir-como-lectores-de-narrativas-ilustradas.

Este trabajo, pues, podríamos dividirlo en varias etapas: formación de la profesora y realización del trabajo en el aula. Esta es la parte que nos interesa aquí. Una parte que a su vez se subdivide en distintos momentos: organización, desarrollo y exposición.

ORGANIZACIÓN. ¿Cómo nos hemos organizado?

No me detendré mucho en esta parte porque sería muy tedioso explicarlo todo aquí.

El trabajo lo planteé en mis cuatro grupos de la ESO, un segundo y tres terceros. Durante todo el curso habíamos ido leyendo álbumes ilustrados en clase, comentado, analizado e incluso hecha alguna actividad a partir de algunos de ellos. El terreno lo teníamos entonces abonado para la creación de los mismos.

Con ideas que fui tomando de mis compañeras del curso del CPR (por ejemplo, de Elvira Laruelo copié poner nombre a los grupos) y con instrucciones de la ponente, dividí a cada curso en cinco grupos de cuatro o cinco alumnos, ni más ni menos. Puesto que con anterioridad ya habíamos realizado algún trabajo en grupo, ya sabían que en cada grupo había de haber un responsable, un coordinador, un vocal y uno o dos secretarios. Dejaron de ser segundo de la ESO o tercero B, C y D, para pasar a ser el Aula de Escritores, Aula de Ilustradores, Aula de Editoriales y Aula de Obras Literarias. Así, cada grupo de cada una de esas aulas recibió un portfolio con la documentación para realizar el trabajo y un nombre (unos escritores, otros ilustradores, otros editoriales y otros títulos de obras. Todos ellos asturianos, en el caso de las obras, ambientadas en la ciudad de Oviedo -para esto me serví del libro de una gran exalumna Rosa Moriano, coautora de Oviedo, ciudad de novela-). ¿Por qué esos nombres? Primero porque era una manera de darle cohesión a partir del concepto de "libro" y su realización, donde no solo interviene un autor, escritor, sino que hay otras personas, entidades relacionadas, y, por supuesto, no sólo por esa cohesión sino también por la necesidad de que conozcan nombres que nos rodean, cercanos, de nuestro entorno; unos actuales, otros no tanto; segundo, porque perseguía que todo girase sobre Asturias, especialmente sobre Oviedo, su ciudad -de nacimiento o de acogida, pero su ciudad a fin de cuentas-.

Se llamasen como se llamasen, todos los grupos de todas las aulas han tenido que hacer el mismo trabajo: buscar una leyenda ovetense, o asturiana, por integrante del grupo; debatir con cuál iban a trabajar como grupo; realizar cada uno su propio story board; seleccionar qué story board era más factible para su trabajo o qué partes de cada uno de los presentados; fichas de personajes; hacer una primera minimaquetación, realizar seis láminas con las que contar la historia... Además, por otro lado, todo lo necesario para montar una exposición (carteles, invitaciones, cartas, cartelas...). Y en medio de todo esto, preparar y recibir a la ilustradora Catarina Sobral.

DESARROLLO. Manos a la obra.

Esta es sin duda la parte más interesante. Aquí es donde colgaremos los vídeos y fotos donde ellos mismos, con palabras e imágenes, irán contando cómo fue la experiencia.

Antes de eso, os indicaremos que durante el proceso hemos tenido dos visitas. Una, la de la ponente del curso, que solo pudo visitar al grupo de 2º de la ESO, Aula de Escritores, porque, aunque no lo parezca en un centro se hacen muchas cosas a parte de las actividades de los libros de texto y el día que ella podía venir los de 3º de la ESO, algunos, estaban en una actividad complementaria de otra materia.